• La asociación se ha sumado al acto de presentación, ante la Audiencia Nacional, del recurso contra el Ministerio de Trabajo para exigir que Conpymes sea reconocida como agente social junto a CEOE (CEPYME), UGT Y CC.OO.
  • Quimeltia denuncia que las pymes y micro pymes no tienen voz propia en el dialogo social.
  • Urge adoptar medidas para facilitar el acceso de las pymes a la negociación colectiva.

El presidente fundador de Quimeltia, Pedro Rodriguez, ha asistido esta mañana al acto de presentación del recurso contra el Ministerio de Trabajo para exigir que las pymes, micro pymes y autónomos tengan voz propia en el dialogo social, “es inadmisible que las pymes que representan el 99,8% del tejido empresarial y el 75% del empleo no estén representadas en el dialogo social en el ámbito estatal con voz propia. En la actualidad, las grandes empresas con posiciones de dominio controlan la representación institucional y el dialogo social con regulaciones hechas a su medida, que suelen perjudicar a las pymes y a las micro pymes”.

El recurso presentado por CONPYMES, Confederación Nacional de Pymes, y de la que es miembro Quimeltia, recurre la decisión de Ministerio de Trabajo denegar la petición de la confederación de ser reconocida como agente social. “Situación anómala que no ocurre en el resto de Europa y que genera una indefensión de los intereses de las pymes, siempre supeditadas a las decisiones unilaterales de las grandes empresas”

Hay que señalar que CONPYMES considera que es la organización más representativa del mundo de las PYMES y AUTÓNOMOS en España y por ese motivo solicitó al Ministerio que procediera a establecer un método de valoración de la representatividad de las organizaciones y poder así, demostrado su peso, ser acreditada como organización participante en el diálogo social. Además, se añade el hecho de que algunas de las organizaciones que la integran ya tienen esa condición.

Para Rodriguez ha llegado el momento de reflexionar sobre los criterios de representatividad patronal. En su opinión el actual sistema no es justo ni democrático, “pues una sola organización, la CEOE, representa los intereses de todos los empresarios y todos sabemos que la mayoría de sus propuestas únicamente defienden los intereses de la gran empresa”